Pasar al contenido principal
El 16 May 2019 8:00 AM

La central de biomasa de la Txantrea, un proyecto complementario al proyecto de rehabilitación energética y regeneración urbana de este barrio, es ya una realidad. La sociedad pública Nasuvinsa, después de haber impulsado el anteproyecto y estudio de viabilidad el pasado verano, acaba de adjudicar a la firma ENGIE Servicios Energéticos S.A. la construcción y explotación, mediante concesión, de la Central y Red de Calor Txantrea, con una inversión total de 12,5 millones de euros.
Actualmente, la empresa adjudicataria está redactando los proyectos definitivos para la consecución de las pertinentes licencias de obras, que se iniciarán este mismo verano, con la previsión de que la instalación esté ya funcionando a finales del próximo año 2020. A partir de este momento, la concesión de la explotación de la instalación y comercialización de la energía generada contempla un plazo de 25 años, durante los que la empresa abonará un canon anual a Nasuvinsa.


Alternativa de la biomasa


La Central de Calor Txantrea, que dará suministro a las comunidades de vecinos y edificios dotacionales que se adhieran a partir de 2020, estará alimentada al 90% por biomasa forestal como alternativa de energía renovable, una materia prima de origen cercano y de explotación sostenible. Esta fuente alternativa implica notables ventajas energéticas por la centralización de la generación de calor y la reducción de la dependencia exterior; medioambientales, por la reducción de emisiones GEI que supone y económicas y sociales, por el aprovechamiento de la masa forestal de Navarra como motor de desarrollo local en el medio rural.
Esta infraestructura, un proyecto seleccionado entre las acciones financiadas por el Programa Operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional 2014-2020 de Navarra por apoyo a la eficiencia, la gestión inteligente y el uso de renovables, todo ello en el ámbito energético, supondrá una iniciativa pionera a nivel estatal tanto por su modelo de gestión público-privada como por sus dimensiones, ya que llegará a poder dar suministro a más de 4.000 viviendas de la Txantrea, así como parte de los municipios colindantes de Burlada y Ansoain.
La central tendrá capacidad para ofrecer suministro energético a 2.000 viviendas y 8 edificios públicos en una primera fase, llegando hasta más de 4.000 viviendas en una segunda fase. Asimismo, el contrato de concesión establece que las tarifas de venta de energía generada con biomasa por parte del concesionario deberán ser competitivas respecto a las tarifas existentes, actualmente referenciadas al barril Brent de petróleo.
El proyecto de Nasuvinsa está impulsado y arropado de forma transversal por tres equipos del Gobierno de Navarra –los departamentos de Desarrollo Económico, Derechos Sociales y Desarrollo Rural y Medio Ambiente que dirigen Manu Ayerdi, Miguel Laparra e Isabel Elizalde- en cuanto que supone una innovadora iniciativa en materia de transición energética, rehabilitación de vivienda y sostenibilidad medioambiental, respectivamente.
En este sentido, la utilización de la biomasa forestal como fuente renovable de origen local, la introducción de la eficiencia energética en la rehabilitación de edificios o la reducción en un 80% de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en este ámbito son algunos de los factores que convierten a la Central de Calor de la Txantrea en un proyecto pionero en el Estado.