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El proyecto de la Central de Calor de biomasa que el Gobierno de Navarra ha promovido en la Txantrea a través de la sociedad pública Nasuvinsa se ha presentado durante una jornada abierta y divulgativa celebrada en el centro comunitario del barrio con participación de las propias comunidades, asociaciones y cooperativas vecinales, así como las intervenciones del director de Relaciones Institucionales de la empresa adjudicataria ENGIE, Alfonso Pascual, y del consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Manu Ayerdi.
Esta novedosa infraestructura, que introduce la biomasa forestal como fuente energética alternativa y sostenible, ha sido impulsada por la sociedad pública Nasuvinsa como complemento y desarrollo del proyecto de rehabilitación energética integral y regeneración urbana Efidistrict en el barrio pamplonés de la Txantrea y su explotación y gestión, mediante un contrato de concesión, fue adjudicada el pasado mes de mayo a la empresa ENGIE Servicios Energéticos S.A., que ha expuesto el proyecto desarrollado y tramitado ya para el inicio de su construcción.
Las obras se iniciarán en cuanto los ayuntamientos de Pamplona y Burlada, sobre los que se asienta la parcela, concedan la correspondiente licencia, con previsión de que, una vez finalizada su construcción, la planta esté ya en pleno funcionamiento y empiece proporcionar servicio para el invierno del próximo año 2020.
Además del consejero Manu Ayerdi y de los técnicos de ENGIE Jordi Serra y Benoit Senejean, que explicaron el futuro funcionamiento de esta red alimentada por biomasa forestal y los beneficios que su suministro de calor puede reportar en ahorro de calefacción y agua caliente y reducción de emisiones GEI, en la jornada participaron también los directores generales de Proyectos Estratégicos y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Rubén Goñi y Pablo Muñoz, respectivamente, así como los técnicos de Nasuvinsa Ana Bretaña, arquitecta directora del proyecto Efidistrict, y el ingeniero Javier Martínez León.


Capacidad para dar servicio a 4.000 viviendas en dos fases


La Central de Calor de la Txantrea tendrá capacidad para ofrecer suministro a las redes de calefacción y agua caliente de más de 2.000 viviendas en una primera fase y otras tantas en una segunda, así como a ocho edificios públicos dotacionales de este barrio pamplonés, con posibilidad de extender el servicio también a otras comunidades de los municipios colindantes de Burlada y Ansoain.
El Gobierno de Navarra, a través de distintas iniciativas transversales emprendidas durante estos últimos años en el ámbito de la sostenibilidad urbana desde las áreas de Energía, Vivienda o Medio Ambiente, está apostando por programas de eficiencia energética, rehabilitación de edificios e introducción de energías renovables en el parque residencial y en instalaciones dotacionales.
Concretamente, el uso de la biomasa forestal en la generación de calor, sustituyendo a otros combustibles de origen fósil, supone una reducción del 80% en emisiones GEI, además de que permite la utilización de una energía renovable y de origen local, ya que está previsto que la mayor parte de la astilla proceda de la masa forestal de la Comunidad Foral.


Inversión de 12,5 millones en un proyecto pionero


El Gobierno de Navarra invierte 6,5 millones de euros, a través de la sociedad pública Nasuvinsa, en obra civil, urbanización e instalación de redes de distribución de la Central de la Txantrea, una iniciativa pionera en el Estado y, de hecho, el proyecto fue seleccionado entre las acciones financiadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional 2014-2020, que cubre el 50% de esta inversión inicial, por el apoyo que supone a la eficiencia energética, la gestión inteligente de la energía y el uso de fuentes renovables. La empresa concesionaria ENGIE, por su parte, acometerá posteriormente el esto de la inversión en dos fases, hasta completar un presupuesto total de 12,5 millones contemplados en la puesta en marcha de esta red urbana de calor. Nasuvinsa recuperará posteriormente su parte de la inversión mediante un canon anual que la empresa concesionaria pagará durante los años de explotación de esta central.
A juicio del consejero de Desarrollo Económico del Gobierno foral, Manu Ayerdi, “el ineludible reto de la transición energética y la adaptación al cambio climático nos obliga a apostar por políticas que combinen la reducción del consumo también en el parque residencial, la introducción de fuentes renovables -que en Navarra ya han alcanzado el 20% del consumo final- y la rehabilitación energética como palanca para la regeneración urbana de la ciudad construida”.
El área de Proyectos Estratégicos que dirige Rubén Goñi en el Departamento de Ordenación del Territorio y Vivienda, a su vez, ha anunciado que desarrollará un programa específico para la promoción de la madera certificada y la biomasa forestal, la introducción de esta materia prima local en el ámbito residencial, ya sea para utilizarla en estructuras arquitectónicas o para aprovechar la astilla como fuente energética, y la dinamización de la industria maderera como motor de desarrollo y creación de empleo en el ámbito rural.